Como siempre digo, aprovecha este tiempo, porque crecen rápido, tan rápido que cuando te quieres acordar, ya llegan al metro cincuenta y, prácticamente, deberás robarle los besos y los abrazos.
Abrázalo siempre
Cuánto más cerca esté tu bebé de tí, mejor. Tu pequeño necesita sentir tu calidez. Aprovecha cada instante para abrazarlo, para tenerlo entre tus brazos. En el mercado existen unas mochilas especiales para que las mamás puedan llevar a sus bebés pegados a sus pechos. Piensa que en las culturas primitivas las mujeres trasladaban a sus
Duerme con él
No sientas miedo de dañar a tu bebé si decides recostarte junto a él en tu cama. Obsérvalo. Sorpréndete con esa insinuación de sonrisa e imagina que tu bebé está soñando que ambos van galopando sobre caballitos alados sobre nubes de algodón. ¿Cómo podrías hacerle daño? Tú eres el hada de sus sueños.
Confía en tus instintos
La naturaleza ha pensado en tí y en tu bebé como un equipo perfecto. Por eso, él sabe cuando debe asomar al mundo; por eso reconoce tu voz, la cual viene escuchando desde hace nueve meses; por eso, sabe cómo succionar dulcemente su alimento de tu pezón. Estaban destinados uno al otro, desde tiempos memorables, estaba escrito en las estrellas que él sería para tí y tú para él.
Ricitos de Oro, ¡tan natural como el amor por tu bebé!