La inducción de hábitos alimenticios saludables desde la infancia es como sembrar las semillas de un jardín. Como mamá, te conviertes en la jardinera de la salud de tu pequeño, y cada elección nutricional es una oportunidad para apoyar su crecimiento y desarrollo.
Descubre cómo iniciar de manera sencilla el camino hacia una alimentación saludable para tu pequeño, cultivando una relación positiva con la comida que sentará las bases para toda la vida.
Plantando las semillas de una vida saludable
Comenzar a cuidar la alimentación de tu pequeño no tiene por qué ser abrumador. En lugar de imponer reglas estrictas, adopta un enfoque gradual y educativo. Introduce alimentos frescos y variados desde el principio, preséntalo de manera divertida. Consulta con tu doctor la forma y edad más recomendable de iniciar a exposición a diferentes alimentos.
Establecer horarios regulares de comidas crea un ambiente de previsibilidad y seguridad para tu pequeño. Establece rutinas que incluyan momentos para el desayuno, comida, cena y dos pequeños snacks nutritivos entre las comidas principales.
Cocinando en familia: una experiencia educativa y divertida
Involucrar a tu pequeño en la preparación de alimentos puede ser una experiencia educativa y divertida. Déjalo participar en la cocina, incluso si es solo para mezclar ingredientes o lavar frutas y verduras. Al hacerlo, creas una conexión positiva con la comida y le das a tu pequeño la oportunidad de explorar diferentes alimentos de una manera práctica, siempre al pendiente y supervisando a tu peque, ya que la cocina puede ser un lugar peligroso.
Además, aprovecha la oportunidad para educar a tu pequeño sobre los beneficios de una dieta equilibrada. Habla sobre los diferentes grupos alimenticios y cómo cada uno contribuye al crecimiento y bienestar. Te recomendamos usar un lenguaje sencillo para que sea un momento ameno y comprensible.
El poder de los ejemplos y las elecciones saludables
Tu ejemplo como mamá o papá tiene un impacto significativo en los hábitos alimenticios de tu pequeño. Múestrale una relación positiva con la comida al disfrutar de alimentos saludables y variados. Comer en familia también es una oportunidad para compartir momentos agradables y fomentar la comunicación.
Cuando se trata de elecciones alimenticias, dale opciones saludables y deja que tu pequeño participe en la toma de decisiones. Por ejemplo, pregúntale si prefiere manzanas o plátanos como merienda. Este sentido de autonomía ayuda a tu pequeño a desarrollar habilidades de toma de decisiones y le da la sensación de control sobre su propia alimentación.
Comenzar a cuidar la alimentación de tu pequeño es un viaje emocionante y lleno de posibilidades. Al introducir gradualmente alimentos frescos, involucrar a tu pequeño en la cocina y conviértete en un modelo a seguir positivo, estás cultivando hábitos alimenticios saludables que perdurarán toda la vida. ¡Este viaje nutricional es una inversión valiosa en el bienestar futuro de tu pequeño!
Fuente:
CinfaSalud. (2023, diciembre 5). Alimentación infantil. Recuperado de https://cinfasalud.cinfa.com/p/alimentacion-infantil/