El cuero cabelludo de tu bebé es algo que se debe cuidar desde el día uno, sin importar si el pequeño nace con mucho o poco cabello. Con esto podrás evitar que le salga sarpullido, irritaciones y otros problemas en esta parte tan sensible de su cuerpo.
Te daremos 5 consejos para cuidar su cabellito, lavarlo adecuadamente, desenredarlo bien, evitar las costras y peinarlos con el cabello húmedo; al igual que prestar atención a la ‘Costra láctea del bebé’ y procurar que sea un momento divertido para ti y tu bebé.
1. Lavar con los productos adecuados
La higiene de la cabeza de tu bebé es muy importante, tenga o no tenga cabellito. Siendo constantes evitarás que tu bebé tenga granitos, sarpullido o irritación provocados por restos de sudor y suciedad.
Dado a que su cabellito se ensucia menos, los shampoos para bebés son más suaves, con un pH neutro, con el fin de evitar cualquier malestar.
2. Desenredar con cuidado
Cuando crecen, se puede complementar su rutina de baño con un acondicionador que ayude a desenredar el cabello. El cabello que es chino se le debe pasar un cepillo o peine ancho, con mucha delicadeza, para evitar dañar a tu pequeño y se convierta en un mal momento para el/ella.
3. Evita acostarlo con el cabello mojado
Procura que su cabello se seque bien antes de atarlo en una coleta o trenza, o de dormir.
La salud de su cabellito depende mucho de la raíz, el cuero cabelludo.
La humedad afecta el tallo piloso, esa parte donde sale el cabellito de su cabecita, así que la mejor forma de secar su cabello es empezar por las partes donde hay más humedad con una toalla y luego dejar que se termine de secar naturalmente.
Tampoco se recomienda salir con el pequeño a la calle con su cabello húmedo, ya que esto podría provocar que se enferme.
4. La costra láctea del bebé
Es un síntoma importante de la dermatitis seborreica infantil, que es algo bastante común en los bebés hasta los 3 años de edad. Sus síntomas son lesiones con forma de escamas o costras en su cabecita.
Sin embargo, no está provocada por falta de higiene, por contagio ni por mala alimentación; es más porque los pequeños en esta etapa tienen una mayor cantidad y actividad de glándulas sebáceas.
5. ¡No olvides la diversión!
El cuidado del cabello debe ser divertido. Muchos pequeños crecieron con sentimientos negativos por distintos motivos, ya sea, dolor al peinarlos, frío, dejar de jugar para bañarse, etc.
Por eso, puedes crear distintas estrategias para que tú pequeño la pase bien y lo disfrute.
Incluye juguetes, jabones que generen espuma, canciones, juegos y ¡más!
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Fuente: https://www.consumer.es/bebe/el-pelo-del-bebe-cinco-consejos-para-cuidarlo.html
